viernes, octubre 30

 
Mi vida se ha contagiado con el virus de la pérdida. En realidad no es mi vida la enferma, soy yo mismo. Contagiarse de pérdidas es facil. Todo a tu alrededor está tan contaminado de pérdidas, que acabas enfermando. Perder no es malo. No mata. Ni es dificil, todos lo hacemos. A veces no hay ni que proponérselo. Perder un archivo. Perder horas. Perder los papeles. Perder un fin de semana. Perder el dia. Perder un recuerdo. No es un desastre, nadie muere. Nadie va a la carcel. Perder es tan facil, uno no tiene ni que proponérselo. Perder nombres, lugares, amigos. Un trabajo, una relación. Una vida. Pero seguimos viviendo. Perderte a ti (amor de mi vida y gesto al cielo con las manos que he aprendido a replicar con el corazón) es una evidencia más de que perder no es más que seguir viviendo. Arrastrándonos. Porque por mucho que perdamos, sobreviviremos desnudos. Al naufragio. Para seguir perdiendo.


jueves, octubre 29

 
"Homo homini lupus"
Hoy tampoco puedo dormir, pero ya no es porque la angustia me muerda por dentro. Ni el aburrimiento. Ni tan solo el miedo. Es porque quiero hacer mil cosas y me robo (quemo y engullo) mi propio tiempo. A veces, me asusto a mí mismo. Me devoro, royendo los huesos de mi propio tiempo, en la soledad de la noche, alumbrado por la luna llena.
"Lupus est homo homini, non homo, quom qualis sit non novit."


sábado, octubre 24

 
Hoy tocaba, de nuevo, dia de compras (cambiar la pila del reloj, pasar por la biblioteca a por el Investigación y Ciencia, y por la sirena: el sushi ultracongelado está de muerte), como últimamente estoy de un ecológico subido, he rescatado una bolsa de playa para meterlo todo dentro. Era roja, naranja y rosa. Al señor que se dedica a diseñar bolsas de playa deberian pagarle un psiquiatra. O un oftalmólogo. O está chiflado o es daltónico. Total, que cuando iba por plena calle mayor, me he visto reflejado en un escaparate: chanclas, pantalón corto, camiseta a rayas azules y bolsa de playa en tonos exóticos. No sé cómo no me ha detenido la policia. Creo que era lo más parecido que he visto nunca a Paco Clavel. Eso sí, en la Ipod, llevaba esto, que lo cura todo, incluso la tristeza. Como siempre, me acordé de ti :


miércoles, octubre 21

 
Tres cosas
Tres cosas que odio:
- que me pisen el talón de las chanclas.
- que me hable más de una persona a la vez.
- volver de correr, meterme en la ducha y que un tio me entre y me pregunte que cómo me va en el curro. Grrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrr.

Tres cosas que me encantan:
- Encender el zippo.
- Subir la musica a todo volumen en el coche.
- Tumbarme en el suelo, mirar el cielo, y hacer formas con las nubes.

Y a ti?

martes, octubre 20

 
(No voy a despertarme porque salga el sol)
Ayer salí a comprar con chanclas, camiseta de tirantes y pantalón corto. Siempre me sorprende a contrapelo el primer dia de otoño. Y las caras de las sombras. El sol, de tan triste, calienta la piel, pero también las muecas. Una primera, ignorándome, una segunda me señaló con el dedo, un enésimo perro me sacó la lengua, una cuarta se dio a la fuga y saltó a los brazos de su madre (no levantaba tres palmos del suelo, pobrecico), una quinta abrió mucho la boca y los ojos. Supongo que ya va siendo hora de sacar la ropa de invierno. Pero me da una pereza que pa qué. Además, me encanta que se me congelen los dedos de los pies.



martes, octubre 13

 
Odio los fines de semana, en casa me entretengo como puedo. He terminado un estudio sobre los congelados (gluten de trigo, almidón de maiz, almidón de arroz, difosfato disódico. Da igual que sea pescado o patatas fritas, todos llevan lo mismo. Da que pensar). Otro estudio sobre las teleseries (alguien puede explicarme la diferencia entre perdidos y flash-forward?). Un trabajo de estadística aplicada: si lanzas diez veces una moneda al aire, una de las dos opciones gana, pero si la lanzas un millón de veces, empatan: comprobado, lo puedo tachar de mi lista. Una investigación profunda sobre la habilidad del simio en cautividad: he conseguido llenar el zippo con gasolina y encenderlo sin morir a lo bonzo. Un ensayo de manualidades avanzadas: confeccionar una guirnalda con tapas de yogour, palomitas rancias, tapones de corcho, folleto de telepizza, cuenquito de Ariel, pinza de la ropa de madera, lata de cerveza (vacia) y bono de descuento del caprabo. Una de improvisación: Bailar con fito. A parte de contestar dos emails, hablar con Nela y escribir este post. Me entretengo como puedo. Y como quiero, al fin.


martes, octubre 6

 
Hoy dios me ha dicho que no cree en mi, que lo he decepcionado profundamente, y que cómo nos lo haremos en navidad. Que si en su casa o en la mia. Y la verdad es que, a estas alturas, no es que ya no crea en dios, es que me da risa.

sábado, octubre 3

 
Camino, arropado por una banda sonora. Visito pisos. La chica de la agencia me cae bien, pero habla por los codos. Subo el volumen, sonrio y asiento con la cabeza. Intento vivir como un pez, inmerso en el ensordecedor silencio. En la música del fondo del mar. Pero no puedo. Hace sol. Me duelen los pies, la cabeza y el alma. Recibo un email. Lo contesto. Me muero de ganas de saltar sobre montañas de hojas secas. Hacía mucho tiempo que el otoño no me sentaba tan bien.

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