miércoles, mayo 10
La semana pasada decidí que necesitaba darle a mi vida una buena mano de pintura; así que, para prepararlo todo, he estado guardando mis recuerdos en cajas de cartón. Al principio no sabía muy bien si ordenarlos por orden cronológico, o por grupos: los amargos, los dulces, los asépticos, los que duelen, los que hacen reir, los que excitan, los olvidados...
Como soy un poco despistado y tiendo a dejarlo todo para el último momento, hoy, con las prisas, he tenido que acabar poniendolos a barullo en unas cuantas cajas de cartón. Y ahora que los veo ahí, amontonados, tan recogiditos, tengo la tentación de hacer borrón y cuenta nueva. Y tirarlos a la basura para volver a empezar. Y lo haría, si no fuera por que, con esto del reciclaje, no sabría si echarlos al contenedor del vidrio, del papel, o al de los resíduos orgánicos. Hombrepordios, ya se veia venir que tanta organización con los desperdícios no podía ser buena.
Comentarios:
<< Inicio
Estaría bien poder reciclar los recuerdos, poder tirar lo que uqeremos olvidar y eliminarlo facilmente, pero seguro que se nos colaría algún recuerdo importante....
Y digo yo: ¿No tienes un altillo, ó una habitación de los trastos ó un trastero (que ahora está muy de moda, te lo venden como ganga en el pack piso-parking-trastero)donde dejar el montoncito de cajas, para que se cubran poco a poco de polvillo?
Va en orgánicos, porque llevan trozos de corazón (y si no, ya te habrías deshecho de ellos hace tiempo).
Yo no podría tirar los míos. Y de hecho, sí, tengo unas cuantas cajas de zapatos llenas de recuerdos, de cosas asociadas a otras... y ahí siguen, ocupando espacio en mi minicasa. Pero es que son mis cajas de recuerdos.
Yo no podría tirar los míos. Y de hecho, sí, tengo unas cuantas cajas de zapatos llenas de recuerdos, de cosas asociadas a otras... y ahí siguen, ocupando espacio en mi minicasa. Pero es que son mis cajas de recuerdos.
Tenemos que aprender a dar cuerda a las manillas del reloj para que siga funcionando, sin detenernos a contemplar lo que un día, algunas horas nos aportaron, fuera malo o bueno...
Menos mal que la vida es larga y la memoria es muy corta, además de ser muy selectiva, la muy cabrona.
Un mecanismo de protección (y supervivencia) se dispara de vez en cuando y zas, las cosas pasan al olvido por arte de magia.
Publicar un comentario
Un mecanismo de protección (y supervivencia) se dispara de vez en cuando y zas, las cosas pasan al olvido por arte de magia.
Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]
<< Inicio
Suscribirse a Entradas [Atom]