miércoles, agosto 10

 
He
Por unos días he jugado a ser niño, a ser feliz. A no pensar en el mañana, ni en qué toca hacer en unas horas; he jugado a hacer esas cosas que salen sin pensar; y a no pensar en las cosas.
Y me he creido un niño. Por lo menos unos días.
He hecho barcos en la arena y los he ensartado en cañas secas que portaban banderas invisibles, mostrando a dios y al cielo dos insolentes tibias y una calavera; me he lanzado a la conquista de los siete mares sin provisiones ni munición, pero con una tripulación dispuesta, de corazón bravío, que hubiera vendido su alma por un polo de fresa. He hecho agujeros en la orilla del mar para enterrarme los pies hasta la rodilla. He esculpido estatuas de culos en la arena mojada y gritado: ¡Ostia, aquí alguien se ha quedado dormido boca abajo! sólo para columpiarme en las carcajadas que bailaban en el aire. Me he subido al carro de la osa mayor y he buscado la estrella polar; por si encontraba mi norte de una vez, aunque fuera por casualidad. Me he tumbado, entregado a las caricias de las olas, esperando una lluvia de estrellas que siempre me encontró dormido. He leido historias para perder el tiempo mientras, sin darme cuenta, ganaba vida. He hablado de cosas importantes con gente desconocida y he discutido vanalidades con amigos del alma. He puesto en hora un reloj de sol. He contado cangrejos en las rocas y he intentado pescar, sin éxito, peces de colores que se reian de mí. He participado en un desfile de medusas y no me han picado (ni las medusas me desean ¿?). Me he puesto un bañador para desayunar y no me lo he quitado hasta después de cenar (llamadme guarro). He olido cabellos mojados y saboreado besos frios. He arropado con toallas y frotando en la espalda para dar calor. He jugado a ser niño y, por unos días, creo que lo he sido.

Comentarios:
eso se llama renacer. Bienvenido ave fenix. Nabrazo! y encantada de tenerte de vuelta.
 
Si es que son listos los ninos, nos llevan de vacaciones porque saben que nosotros solos no sabemos divertirnos.
Precioso post, por cierto, muy bien escrito y lleno de ternura... Porque no me saldran a mi cosas asi, joder ?!!! caguenlaleche!!!
.
 
Me alegro por ti, compadre.
De niño a niño.
 
[sonrisota en la cara]
 
se me ponen los ojos comoplatos al leer todo lo que has hecho.. y se me abre la boca de la envidia..
me alegro mucho que hayas disfrutado y tambien mealegro de que hayas vuelto para contarnoslo..

besitos alegres de tu princesa.
 
¡Bienvenido!
Me alegro de que hayas sido tan feliz. Espero que no pierdas del todo tu espíritu infantil.
Un abrazo
 
¡Qué envidia! :)
 
No te lo has creído. Lo eres, un niño "muy especial"

Besos coco. Me alegro verte con este olor. Hueles a nuevo, a playa, a moreno, a descanso. Hueles bien.
 
Yo no soy ningún sol, pero brillaría siendo tu amiga.
Estoy en el intento, casi casi lo consigo.
Un beso.
 
Te envidio.
 
Por lo que leo...has podido ser TU MISMO, no?

Bienvenido!! (como mi felpudo de la puerta)
 
Yo también he estado cogiendo conchas y haciedo castillos de arena, espero que el año que viene me sigan esperando. Es lo que deberían de recomendar los psiquiatras a la gente con estrés y ansiedad, vete a la playa a hacer castillos de arena y recupera la ilusión!!Ahí no te miran raro por jugar a ser niño....

Me ha encantado lo que has escrito
 
¡Ele minicoco! bienvenido a tu otoño-invierno de adulto donde tardarás unos... mmmmh...diez días en olvidarte de los besos de agua.
 
Ahora es cuando, habiendo reconectado con tu niño ¡¡debes seguir siéndolo!!

No pierdas nunca esa capacidad de hacer barcos de papel, de reír hasta cansarte, de soñar, de dubujar en el aire, de imaginarte pirata.

No pierdas nunca de vista que ese niño sigue estando dentro de ti :)
 
Sois unos soles, es encantador volver a ser niño, y mas a vuestra vera, pero tiene razón Nepo, esto no dura más de diez días. Hoy ya me he echado unos diez años encima.
 
Hola, corazoncito, me encantó encontrarte de nuevo y que vuelvas con ánimos renovados. Anda, que no se diga. Y no hagas caso de esas tontas medusas, pa mí que eran ciegas o cortas de vista.
Un beso, corazón.
 
No hay nada como volver de las vacaciones, con el corazón tranquilo y el espíritu renovado.
Y, por cierto, tú siempre serás nuestro niño...
 
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